Siempre me he preguntado de qué están hechos los sueños; por qué deseamos lo que deseamos y no deseamos otra cosa.
¿Vosotros lo sabéis?
La verdad es que yo no tengo ni idea; no sé en qué momento de la vida uno tiene una idea que se tatúa en su interior y se convierte en eso que quiere; en eso que ansía hacer y conseguir por encima de todo lo demás en su vida; no sé en qué momento esa idea se vuelve obsesión y se traduce en sentir éxito o fracaso en función del grado de cumplimiento de ese objetivo.
¿Cómo se transforma un deseo en un sueño? ¿Qué define que sea un sueño?
A veces me da por pensar que si no nos centráramos tanto en querer conseguir una cosa es posible que tuviéramos más éxito del que solemos tener; es como si el hecho de «obsesionarnos» con querer hacerlo se volviera en nuestra contra, y en vez de seguir el camino, difícil o no, y «simplemente» hacerlo (porque hay que hacerlo), nos paráramos a pensar tanto en la estrategia que al final lo único que conseguimos es ver todos los problemas que pueden surgir y por supuesto en lo difícil que es lo que queremos conseguir, desalentándonos desde el minuto uno.
No sé si os habéis dado cuanta de que lo común cuando alguien habla de sus objetivos, deseos o sueños, algo que acompaña siempre a su exposición es lo difícil que es hacer eso que quiere y por supuesto la cantidad de cosas que tiene en contra para poder conseguirlo, como si incluso antes de haber empezado a hacer nada ya se pusiera un sinfín de barreras, sobre todo mentales, que al final considero que son las más importantes, con las que le resulte imposible llegar a buen puerto, o bien barreras que justifiquen que no va a conseguir eso que desea delante de los demás.
Tenemos alma de mártir; no he conocido a nadie que diga «pues oye, mi sueño es X y me va a resultar facilísimo conseguirlo» ¿Acaso tiene más valor cuanto más esfuerzo y sufrimiento nos requiere? No sé cuál es la respuesta correcta, pero desde luego sé que es bastante común pensar así, como si las cosas solo fueran importantes porque nos cuesta la misma vida conseguirlas…
A veces creo que en realidad los sueños, que deberían estar forjados con nuestra ilusión y esperanza, están forjados con todo lo contrario, con nuestra frustración y ansiedad.
¿Y sin nos limitáramos tan solo a hacerlo? ¿Y si dejáramos de lado todo demás y simplemente actuáramos?
Hola Cris, el sueño forma parte de la vida, si no se sueña no se vive. Gracias por tu post. Te deseo una estupenda tarde de domingo. Yo estoy por la sierra y el día es espléndido. Un besazo, Manuel.